sábado, 24 de octubre de 2009

Pelotudos en todos lados

Los pendejos que pretenden compensar con cánticos o exteriorizaciones presuntamente festivas la vergüenza que significa profesar una religión es ya de por sí patética. Por vivir a la vuelta de la iglesia Santa Cruz, estoy acostumbrada a toparme con esa clase de imbéciles. Sin embargo, lo que vi/escuché esta semana ya supera todos los límites: una manga de pelotudos consumados cantando aguinaldos. No sé si será pura desubicación o que.?

No hay comentarios:

Publicar un comentario